La cirugía periodontal implica todas las intervenciones quirúrgicas en las encías y el periodonto que sirven para la mejora estética o funcional de la situación del paciente. Estos procedimientos suelen ser necesarios para rescatar dientes muy dañados, eliminar raíces rotas en dientes existentes o mejorar el atractivo estético de un paciente.
La terapia quirúrgica para la periodontitis es necesaria si se presentan los siguientes hallazgos: formas graves de periodontitis y si las bolsas periodontales no cicatrizan después del tratamiento periodontal no quirúrgico.
Algunos procedimientos quirúrgicos periodontales incluyen:
Regeneración de estructuras óseas y tisulares.
Después de una terapia exitosa de periodontitis (la eliminación de una infección bacteriana), en algunos casos, los huesos perdidos y los tejidos asociados pueden reconstruirse en el diente. Hay varias técnicas quirúrgicas disponibles para este propósito, todas las cuales implican una intervención mínima en el paciente (microcirugía).
Recuperación de las encías
Hoy contamos con varias técnicas para la regeneración (reconstrucción) de las encías perdidas disponibles que pueden aumentar significativamente la calidad de vida.
Alargamiento quirúrgico de la corona.
Se necesita una extensión quirúrgica de la corona para rescatar los dientes profundamente dañados que han perdido su corona natural, o partes de ella, debido a caries o accidentes, o en individuos con una «sonrisa gomosa».
Amputación de la raíz
La enfermedad periodontal o el tratamiento fallido del conducto radicular pueden conducir a situaciones en las que se destruye una raíz y es necesario eliminarla. Este es especialmente el caso de los dientes cuya extracción tendría consecuencias significativas para el paciente.
La terapia periodontal microquirúrgica incluye el uso de ayudas de aumento (lupas o microscopio) más el uso de instrumentos microquirúrgicos especiales. El uso de tipos especiales de equipos dentales y las habilidades de nuestras profesiones dentales aseguran un traumatismo mínimo en el tejido quirúrgico, menos molestias posteriores al procedimiento, poca cicatrización y el resultado positivo del procedimiento en sí.